La Ciudad de México es un paraíso para los amantes de la comida callejera. Sus calles vibran con aromas, colores y sabores auténticos que no se encuentran en ningún otro lugar del mundo. Sin embargo, para muchos visitantes, el miedo a enfermar por consumir alimentos en la calle puede ser un obstáculo. En este artículo, descubre los 10 platos callejeros imperdibles en CDMX y estrategias prácticas para disfrutarlos con seguridad.
Los 10 Platos Callejeros que No Puedes Dejar de Probar en CDMX
- Tacos al Pastor: Considerados la joya de la comida callejera en Ciudad de México, los tacos al pastor son lonchas finas de cerdo marinadas y asadas en un trompo vertical. Se sirven en tortillas de maíz con cebolla, cilantro, piña y salsa picante. Su origen se remonta a la migración libanesa, que adaptó el shawarma al estilo mexicano. Probar un sábado por la noche en un puesto popular es una experiencia auténtica que deleita los sentidos.
- Tacos de Canasta: Estos tacos se venden desde la mañana, guardados en canastas que mantienen el calor y la humedad para que la tortilla quede suave. Rellenos con opciones variadas como papa, chicharrón, mole verde y frijoles, son económicos y deliciosos. Su versatilidad y practicidad los hacen un must para el desayuno o la merienda.
- Tacos de Guisado: Una categoría que incluye una gran variedad de guisos tradicionales, desde arroz con huevo duro, hasta chicharrón en salsa verde o carne deshebrada. Estos tacos se conocen por su sabor casero y sazón auténtico. Se venden en puestos concurridos en mercados o calles transitadas.
- Elotes y Esquites: Un clásico que no puede faltar son los elotes (mazorcas de maíz) asados o hervidos, untados con mayonesa, queso cotija, chile en polvo y limón. Similarmente, los esquites, que son granos de maíz cocidos con especias y servidos en vaso, son la mejor botana callejera para cualquier hora del día.
- Tamales y Guajolotas: Los tamales son masas de maíz rellenas con carnes, salsas o vegetales, cocidas envueltas en hojas de maíz o plátano. La «guajolota» es una torta que lleva un tamal en su interior, ideal para un desayuno energético. Se venden normalmente en las mañanas acompañados con atole, una bebida de maíz caliente y dulce.
- Quesadillas: No confundir con las versiones comerciales, las quesadillas callejeras en CDMX pueden llevar diferentes tipos de relleno como flor de calabaza, huitlacoche o chicharrón prensado. Servidas en tortilla de maíz y cocidas sobre comal al momento, son una explosión de sabor tradicional.
- Gorditas: Son tortillas gruesas de maíz que se abren para rellenar con guisos diversos como chicharrón, frijoles, papa con chorizo o carne. Son una opción sustanciosa y económica, perfectas para un almuerzo o cena rápida.
- Tostadas: Crocantes y cubiertas con diversos ingredientes, desde frijoles refritos, pollo, ceviche hasta ensaladas picantes, las tostadas son versátiles y refrescantes. Se venden en mercados y puestos fijos por toda la ciudad.
- Tortas Ahogadas: Originales de Jalisco, pero muy populares en CDMX, estas tortas llevan carnitas y se «ahogan» en una salsa de jitomate picante y chile de árbol. Son un platillo fuerte y lleno de sabor que todo turista debe probar.
- Chiles en Nogada (estacional): Aunque más propio de la cocina tradicional, se pueden encontrar versiones callejeras en la temporada de septiembre. Son chiles poblanos rellenos de picadillo, cubiertos con una salsa cremosa de nueces y adornados con granada, representando la bandera mexicana con sus colores.
Cómo disfrutar la comida callejera de la Ciudad de México, sin enfermarte
Probar la comida callejera en Ciudad de México es seguro si sigues algunas recomendaciones básicas que te ayudarán a evitar malestares estomacales. Aquí algunas estrategias prácticas para evitar intoxicación alimentaria:
- Elige puestos concurridos: La afluencia de clientes es señal de calidad y rotación rápida de alimentos, lo que reduce el riesgo de contaminación.
- Observa la higiene: Prefiere vendedores que usen guantes o utensilios limpios y mantengan su espacio ordenado.
- Consume alimentos bien cocidos: Los tacos, tamales y elotes que se cocinan o calientan al momento son más seguros.
- Evita agua no embotellada: Solo bebe agua embotellada o bebidas selladas y evita hielo en zonas desconocidas.
- Lávate las manos o usa antibacterial: Antes de comer, si no hay lavabo disponible, el gel antibacterial es esencial.
- Prueba poco a poco: Introduce alimentos callejeros gradualmente para que tu sistema digestivo se adapte.
- Consulta recomendaciones locales: Pregunta a residentes o guías sobre puestos confiables y los mejores horarios para visitar.
